Aunque pueda parecer una opción segura, incluso aburrida, hay muchos argumentos a favor de la paleta de colores neutros cuando nos queremos enfocar en el diseño interior de nuestro hogar. Este versátil esquema de colores nunca pasa de moda y permite crear fácilmente un esquema de diseño cohesivo en toda la casa. Además, es un fondo eficaz para resaltar los muebles claros o las tapicerías y accesorios coloridos, lo que facilita la adaptación de la decoración a las diferentes tendencias de diseño o temporadas. En las casas pequeñas, una paleta de colores neutros es especialmente útil para crear una ilusión de espacio, ya que refleja la luz. A continuación te dejamos cinco formas distintas de incorporar una paleta de colores neutros en tu casa.
1. Utiliza diferentes tonos
Una vez que hayas elegido un tono neutro, utiliza diferentes tonos y matices para crear una decoración cohesionada y con capas para que le añada complejidad al diseño. En lugar de colores convencionales como el beige y el blanco, explora otros tonos neutros como el malva, el verde salvia, el gris, el terracota, el lila y el azul marino.
2. Planifica tu esquema de iluminación
El aspecto de un espacio neutro cambiará en función de la iluminación. Utiliza la luz natural o artificial para añadir profundidad a una habitación con una paleta de colores neutros.