El otoño pasado, se reveló que Kim Kardashian mantendría la casa de San Fernando Valley diseñada por Axel Vervoodt que ella, Kanye West y sus hijos compartían tras su divorcio del rapero. Ahora, la fundadora de la firma de belleza KKW está echando más raíces en el enclave de Hidden Hills. Según Dirt, la artista y empresaria acaba de comprar una casa adyacente a la propiedad diseñada por Vervoordt por 6.3 millones de dólares.
La vivienda, de cuatro dormitorios y tres baños, necesitará sin duda algunas reformas antes de ajustarse a los estándares minimalistas de Kim Kardashian. Construida en 1975 y propiedad de la misma familia desde entonces, la casa de 394 metros cuadrados está más o menos alineada con los estándares de los años 70: la sala tiene paredes de espejo, una escalera de moqueta verde y una barandilla de hierro forjado bastante chillona. Se puede suponer que el resto de la casa también se encuentra en un estado conservado pero anticuado, pero solo la sala y el comedor aparecen en las fotos. Gran parte de la vegetación en el espacio exterior parece muerta, pero con media hectárea, hay un montón de espacio para hacer un buen uso después de una transformación.
En 2019, Kardashian y West compraron otras dos propiedades de Hidden Hills, por lo que esta propiedad adicional supuestamente deja a Kardashian con casi 3.5 hectáreas de espacio en el vecindario de Hidden Hills. Aunque la adición más reciente está justo detrás de la residencia principal, que AD recorrió en 2020, hay un camino de herradura comunitario que separa a los dos, por lo que parece que fusionar completamente las dos propiedades de tierra será un desafío, si es que es posible. Aun así, poseer el terreno vecino proporcionará a Kardashian y a sus hijos —North, de 8 años; Saint, de 6; Chicago, de 4, y Psalm, de 3— una valiosa privacidad.
Artículo publicado originalmente en AD US.
Traducción y adaptación de Fernanda Toral.
